Querido Tata Juan, Aunque ya no estés físicamente a nuestro lado, tu presencia vive en cada recuerdo, en cada consejo, en cada acto de amor que dejaste sembrado en nosotros. Fuiste un guía, un ejemplo y nuestro refugio. Tu partida dejó un vacío inmenso, pero también una huella imborrable en nuestros corazones. Gracias, Tata por enseñarnos con tu vida, por amarnos con tu alma y por seguir cuidándonos desde donde estés. Te llevaremos siempre en nuestros corazones. Con amor eterno, familia Fernández Romero

Querido Tata Juan, Aunque ya no estés físicamente a nuestro lado, tu presencia vive en cada recuerdo, en cada consejo, en cada acto de amor que dejaste sembrado en nosotros. Fuiste un guía, un ejemplo y nuestro refugio. Tu partida dejó un vacío inmenso, pero también una huella imborrable en nuestros corazones. Gracias, Tata por enseñarnos con tu vida, por amarnos con tu alma y por seguir cuidándonos desde donde estés. Te llevaremos siempre en nuestros corazones. Con amor eterno, familia Fernández Romero

Mi querido tatita Juan, fuiste un hombre ejemplar, buen padre, cariñoso, buen esposo, hombre virtuoso y un abuelo que siempre estuvo preocupado por sus nietos incluso en la distancia, gracias por tus consejos y por tus incontables oraciones por cada uno de nosotros, en especial por mi Vicentito. Tú partida nos duele a todos, pero sé que estás descansando y estoy segura que a tu encuentro fue nuestra nenita y ya están juntos disfrutando. Te quiero siempre. Carolita.

Para la familia Fernández Cantellano, mi más sentido pésame, a la distancia acompañándolos, un brazo

Nuestras sentidas condolencias para nuestra querida amiga Marcia y familia, ante la partida de su padre. Que su alma regrese a la fuente de Amor infinito de donde proviene...